Esta agradable y atinada caricatura, la encontré hojeando el periódico "El grafico" del lunes 21 de septiembre y pienso que no hubo mejor forma de retratar como nos sentimos los mexicanos con el aplastante anuncio del señor Carstens y el cinismo con el que la clase política se pavonea.
Según lo que hemos podido ver en discursos y anuncios del gobierno federal, el dichoso impuesto servirá para ayudar a las personas más pobres y desprotegidas del país, asegurando que el dinero recaudado con este impuesto llegará directamente a las personas que más lo necesitan.
Pienso que primero que nada, habría que recordarles al pendejo de nuestro presidente y su gabinete que si México es un país tercermundista y lleno de pobreza, en gran medida se debe a los atracos y despilfarros del gobierno y de la clase a la que pertenecen. El pueblo mexicano no tiene porque subsanar con más dinero los boquetes que han dejado su avaricia y sus ganas de joder.
Por otro lado me asquea la forma en que intentan engañarnos con sus comerciales de quinta, en los cuales se aprovechan de la gente más pobre para apelar a la lastima de los mexicanos y con esto poder aplicar medidas que terminen por generar un nuevo orden social. Un orden en el cual sólo exista la clase política y la clase pobre.
Yo me pregunto si acaso las personas que supuestamente se verán beneficiadas por dicho impuesto no tendrán que volver a pagarlo cuando por su cuenta adquieran algún producto. Creo que finalmente todos terminarían pagando el "pinche impuesto". Esto con obviedad no es preocupación para una clase que tiene todos los medios y prestaciones sacados del mismo dinero que ya pagamos todos en impuestos.
Por ultimo creo que a "CASTRENS" (no es un error de ortografía) poco le preocupa esta situación pues se nota que a el jamás le ha faltado "el pan de cada día".
1 comentarios:
Que cobren impuesto sobre productos de lujo no sobre alimentos y medicinas están perdiendo la razón
Publicar un comentario
Sientete libre de expresar tu opinion.